Un vecino muy ruidoso. Impagos. Conflictos con otro propietario por una derrama… Un edificio de vecinos es, en ocasiones, un campo de batalla en el que nos sentimos rodeados de enemigos. La convivencia es un desafío hasta para los más pacientes, por eso es normal preguntarse dónde acudir cuando hay problemas en una comunidad de vecinos.
Las tensiones entre propietarios de una comunidad pueden, incluso, afectar a los nervios de algún vecino. Por ejemplo, si aparece una humedad y nadie se pone de acuerdo para solucionar el problema durante semanas. Mientras tanto, la persona afectada está sufriendo las consecuencias y necesita una solución.
Puede que alguna vez hayas oído hablar de estas situaciones, te estés enfrentando a un desacuerdo o quieras información para prevenir conflictos. Es normal preguntarse dónde acudir cuando hay problemas con vecinos.
“¿Conoces la Ley de Propiedad Horizontal? Es, por decirlo de alguna forma, la normativa de las comunidades de vecinos”
¿Conoces la Ley de Propiedad Horizontal? Es, por decirlo de alguna forma, la normativa de las comunidades de vecinos. Data de 1960, aunque ha sido recientemente actualizada a principios de marzo de 2019. Esta ley contiene las líneas maestras de actuación ante los problemas entre propietarios de un edificio.
Por ejemplo, establece que las cuotas de participación ordinaria y de las derramas extraordinarias deben ser aprobadas en Junta de Propietarios. Una vez aprobadas son exigibles. Si un vecino no paga, la Junta puede acordar un requerimiento de pago y notificárselo por burofax antes de acudir a la vía judicial.
Entonces… ¿qué hay que hacer si tengo problemas con los vecinos?
Está muy bien conocer la legislación y sus diferentes soluciones, pero a efectos prácticos, ¿qué hay que hacer si tengo problemas con los vecinos? Por ejemplo, ¿qué hacer cuando un propietario aparca dos vehículos en una misma plaza de garaje?
La primera acción que puedes tomar es informar al presidente de la comunidad para que ejerza su papel de mediador con el vecino que está causando el problema. Puede tratar de solventar el asunto por su cuenta u organizar una reunión a tres bandas en la que se discuta la situación y las posibles soluciones.
“La primera acción que puedes tomar es informar al presidente de la comunidad para que ejerza su papel de mediador”
Si a pesar de los esfuerzos de mediación del presidente el conflicto no se soluciona porque el vecino en cuestión no cambia de actitud, pueden adoptarse medidas más drásticas en una Junta de Propietarios como denunciar. Una vez aprobadas por consenso, es el momento de ejecutarlas.
Es habitual, por poner un caso, que las molestias por ruido se gestionen a través de una demanda administrativa, tramitada por procedimiento ordinario. Apostar por la mediación legal tiene un coste, así que debería ser el último paso ante un conflicto vecinal.
A modo de conclusión, te recordamos dónde acudir cuando hay problemas en una comunidad de vecinos. Primero al presidente, después a la Junta de Propietarios y, finalmente, apostar por una demanda administrativa.
